Llegó el día en que me veo entre la espada y la pared... Pues es aqui donde un amigo, por su amigo, me ha pedido que mantengamos la distancia entre nosotros y, en realidad, no me siento lista para hacerlo. Para traicionarme a mí misma y a esa promesa que me hice de no lastimar a ningún amigo por un tercero y siendo aqui al revés... ¿es traicionarme igualmente? ¿Sería faltarme a mí misma y no respetarme? No quiero abandonar esa creencia porque recuerdo perfectamente el dolor las lágrimas y el sentimiento de abandono...
No quiero!!